viernes, 16 de noviembre de 2012

Drachenfest: Tercia de día, señorita de noche

Con éste terminan mis entradas sobre los últimos Drachen (o eso creo, jajaja), en espera de ir adelantando lo que vamos a llevar para la próxima edición.

En el post anterior os comentaba lo que llevé como tercia y, aunque prácticamente todo el día íbamos en camisa y pantalón por lo que pudiera acontecer, un par de noches, la última y la de la supuesta fiesta de máscaras, nos arreglamos un poco.

No tenía más que una falda que podía servirme para el evento, y tenía muchas ganas de hacer un corset porque, hasta la fecha, no me había hecho ninguno. Siempre digo que me gustaría coser cosas variaditas a modo de "fondo de armario", pero siempre estoy cosiendo para el próximo evento, para tal o para cual, así que, como no había tenido por qué coserme un corset, no me lo había hecho. Aprovechando que nos dijeron que un día habría fiesta de máscaras, aproveché para estrenarme.

Como la idea era utilizar la prenda en un rol en vivo, utilicé rigilene, ballenas de poliéster, 100% anacrónicas pero hoygan, la mar de útiles cuando no sabes si te van a secuestrar los orcos en plena noche. Por lo demás, confeccioné el patrón según se acostumbraba en los siglos XVI-XVII. Realmente no son los corsets que estilizan y hacen un cuerpo "bonito", sino que hacen un cuerpo raruno tipo barrilete: no marcan la cintura y encima aplastan el pecho. Lo suben, sí, pero lo aplastan, pero la idea era adaptarlo para la época y es lo que hay. Los corsets "que molan" se hacen a partir de patrones del siglo XIX o incluso por transformaciones actuales de cuerpos base.

Por otra parte, encontrar brocados de algo que no sea poliéster es harto complicado, por no hablar de caro y más aún si pretendes comprarlos desde Donosti. Al final compré un brocado de tapicería en poliéster a través de la web www.telas.es, que os recomiendo porque funcionan de maravilla, tienen mucho material y a precios bastante razonables.


 Corset ya terminado, a falta de agujerearlo para ponerle las cintas

Finalmente, mi falda no pegaba ni con cola con la tela del corset, así que compré otro brocado, este sí, en Donosti, bastante chulo. La idea fue hacer una falda de media capa. El problema fue que el dibujo de la falda no hacía viable esta idea, así que corté la tela como si fuera una falda de media capa, pero tuve que añadir unos triángulos en la base. Al final me quedé bastante contenta porque los triangulillos no son muy grandes y los coloqué siguiendo el dibujo del brocado. Entre eso y el vuelo de la falda, lo cierto es que quedan completamente disimulados.


 En la primera imagen, el corset casi terminado (sin terminar de coser, como veis por los alfileres, mi pobre máquina se reveló contra los hechos y me costó bastante coserlo... la pobre acabó en la UVI, pero ya está como nueva). Debajo, la tela que había comprado para la falda y encima, la máscara que me hizo Joel Gûre para el Makimura (como podéis ver unas cuantas entradas más abajo), que me iba que ni elegida adrede con la combinación de colores que había elegido para el traje. En la foto de al lado, me veis ya con el traje completo terminado haciendo la "foto tuenti". Una está sola en casa y hace sus probatinas ¿qué pasa? Conste que me he comprado un maniquí, la Gertru, y va a ser la que va a testear próximos modelitos, jajaja.


 Finalmente, en pleno Drachen. Sí, lo que veis es un imperdible, soy lo más peor... pero no pude ajustarlo decentemente porque no conseguí pillar a alguien por casa en el momento adecuado y es muy complicado ver cuál es la altura adecuada para coser el tirante sin tener el corset puesto... De todas formas, finalmente (y sí, ya a la vuelta) le puse unos cordoncillos para ajustarlo al gusto y no tener que andar haciendo el pata con imperdibles...

Espero que os haya gustado, un saludillo y nos vemos pronto.



2 comentarios: