El año pasado me quedé sin visitar tierras alemanas contra mi voluntad, pero al menos eché una mano con el vestuario de Yazston.
El Drachenfest dura cinco días, de manera que hacía falta tener buen fondo, sobre todo de camisas y pantalones. Como Yazston ya tenía varias prendas que se adecuaban a la temática, me encargó que le hiciera una camisa, para la que me dijo que obrara como buenamente me pareciera. Como ya tenía un par de camisas "multiuso" que lo mismo le venían bien para esta ambientación como para otra más bajomedieval, decidí hacerle una camisa con mangas abullonadas y cuello a la valona, típicas del XVII. La verdad es que me volví loca con el condenado cuello ¡son más difíciles de lo que parecen, malditos! Pero el que la sigue la consigue y todo eso y al final quedan muy chulos. La verdad es que a mí me encantan mil estos cuellos, visten cualquier cosa que pongas encima:
Primeras pruebas, con las mangas mal colocadas y el cuello sin hacer, pero ya se va viendo el efecto de la camisa. Las mangas muy abullonadas quedan estupendas cuando la ropa que pones por encima va abierta y se puede dejar que asomen. El material que elegí fue lino, el más habitual en esta época. Resulta más costoso que las telas de algodón, como el lienzo, más rústico, que hemos utilizado este año, pero la verdad es que el resultado es mucho más bonito y merece la pena... tiene un cuerpo diferente y un brillo y un color mucho más vistosos, aparte de que era mucho más usual el uso del lino que el del algodón.
En el propio Drachen, tenemos a Yazston con otros tres piltrafas, preparando una encamisada que al final no tuvo lugar. En cualquier caso, aquí podemos ver cómo quedó finalmente la camisa.
Aparte de la camisa que me encargó él, quise hacerle una cuera para que fuera con una indumentaria más terminada. Aproveché, además, el tutorial para coleto y cuera que subió Elro en el blog que preparó para el evento: Una Pica para Gunther. Si estáis interesados en preparar vestimenta para este periodo (y más aún si tenéis intención de apuntaros como Tercios al Drachen del año que viene), os recomiendo que echéis un vistazo al blog si no lo conocéis, porque tiene muy buenas ideas sobre vestimenta y recomendaciones más que interesantes sobre películas y demás. Aunque desde ya os adelanto que si queréis ir de Tercios, podéis ir sacando ideas de la película del "Alatriste". Es mala, síp, a mí me vais a contar, que me la he tragado como tres veces, pero el vestuario es impecable no, lo siguiente.
Como no andaba sobrada de tiempo y me dio un poco de miedo meterme a confeccionar piel (hasta la fecha no la había tocado, ya os contaré cómo este año sí le echamos ganas, nos hicimos con unas buenas piezas de serraje y el resultado es más que satisfactorio), hice una "falsa cuera" a partir de antelina, a la que le di cuerpo con una tela gruesa que tenía y que utilicé como forro. El resultado es vistoso y nos gustó bastante, pero lógicamente la antelina no da una protección adecuada para las batallas así que, aunque queda aparente, no la pudo utilizar como armadura de cuero. Eso sí, sacó recursos y la utilizó con el gambesón por dentro, lo que no habría estado mal de no ser porque yo la hice tomando sus medidas sin gambesón, así que... la llevaba un tanto prieta, pero bueeeeno... mejor eso que no darle uso ¿no?. En cualquier caso, ahora que ya apaño con serraje, para el año que viene tengo intención de hacerle un coleto o cuera en cuero o serraje (ya iremos viendo qué nos apetece) y me temo que ésta se quedará "para vestir", fuera de batalla.
Como soy adicta a sacar fotos hasta de las piedras, tengo un montón del "making-off". Aquí tenéis la cuera en pleno proceso. En un primer lugar pensé rellenarla con acolchado, pero no me gustó nada el efecto del relleno cuando se lo puse y ahora tengo un montón de relleno que no uso para nada en un armario, ejem. Pero bueeeeno... igual algún día sirve para algo. Por lo demás... apufff por estos tiempos aún no había hecho los cursos de confección industrial y aún me dedicaba a hilvanar y pasar hilos, como pueden ver por los restos que quedan en la foto. ¡Ahora ahorro mucho más tiempo! Antes me costaba la vida hacer cuatro tonterías...
Yo y mi manía de probarme todo lo que hago (sí, también lo ajeno) y es que, aunque Yazston se suele portar bien como maniquí, no siempre está por casa cuando lo necesito. Aquí, con la camisa terminada (aunque sin cuello todavía, me costó animarme a hacerlo), probé el efecto de la cuera que todavía estaba en fase de elaboración. Como las mangas son desmontables, me interesaba ver cómo quedaba con y sin ellas.
Y esto fue lo que finiquité el año pasado. Este año, gracias a los cursos de confección industrial y a que he dispuesto de mucho más tiempo, he tenido opción de confeccionar bastantes más prendas, así que irán en otro post que subiré en breves.
¡Un saludillo!
Esta genial, me encanta como te quedaron los trajes. ¡Yo quiero una camisa!
ResponderEliminarJuaz, muchas gracias. Las de este año salieron ya mejor, aunque el lino, como digo, me gusta mucho más que el algodón para las camisas. En cualquier caso, cualquiera de las opciones es buena según para qué lo quieras.
ResponderEliminarYa sabes, concrétame qué quieres y apañamos lo que más convenga :)